Santos Inocentes
El 28 de diciembre, la Iglesia conmemora a los Santos Inocentes, los niños que murieron por orden de Herodes en su intento de eliminar al Niño Jesús. San Quodvultdeus los llama mártires que, sin poder hablar, ofrecieron su vida por Cristo. Este día nos invita a reflexionar sobre el valor de la vida y la necesidad de proteger a los más pequeños y vulnerables en nuestra sociedad.

28 de diciembre - Santos Inocentes

En este día, la Iglesia recuerda a los niños que fueron asesinados por orden del rey Herodes en su intento de eliminar al Niño Jesús (Mateo 2, 16-18). Los Santos Inocentes, a pesar de no ser conscientes, entregaron sus vidas por Cristo y son considerados mártires, ejemplos de pureza y del valor de la vida humana.


Comentario de San Quodvultdeus

San Quodvultdeus reflexiona sobre los Santos Inocentes con estas palabras:
"Hoy son mártires los que aún no pueden hablar. Apenas nacen, mueren por Cristo. Los pequeños niños no saben aún expresar su fe, pero ya lo muestran con su muerte" (Sermón 2 sobre los Santos Inocentes).

Este comentario destaca:

  1. El martirio en la inocencia: Aunque estos niños no comprendían el motivo de su sacrificio, su muerte es un testimonio de Cristo, quien ya había entrado en el mundo como Salvador.
  2. La vulnerabilidad protegida por Dios: Estos pequeños, que no podían hablar ni defenderse, representan a todos los inocentes y vulnerables que merecen cuidado y protección.
  3. La lucha contra el mal: La muerte de los Santos Inocentes nos recuerda que el mal intenta sofocar la luz de Cristo, pero no puede vencer el plan de salvación.

Lecciones de los Santos Inocentes

  1. Defender la vida: Los Santos Inocentes son un llamado a valorar y proteger la vida desde su concepción hasta su fin natural. Son un grito contra las injusticias que arrebatan la vida a los más indefensos.
  2. Confiar en el plan de Dios: Aunque el mal parece triunfar momentáneamente, la historia de la salvación nos enseña que Dios siempre tiene la última palabra.
  3. Reconocer la dignidad en cada vida: Su martirio nos invita a reconocer la imagen de Dios en cada ser humano, especialmente en los más pequeños y desvalidos.

Significado actual de esta fiesta

En un mundo donde la vida de muchos inocentes sigue siendo amenazada por el aborto, la violencia y las injusticias, los Santos Inocentes nos recuerdan nuestra responsabilidad de ser defensores de la vida. Cada vida, sin importar lo frágil o indefensa que sea, tiene un valor incalculable ante los ojos de Dios.


Maneras de vivir este día

  1. Oración por los no nacidos y los niños vulnerables: Pide por la protección de la vida en todas sus etapas y por quienes trabajan para defenderla.
  2. Apoyo a causas provida: Contribuye con tiempo, recursos o apoyo a organizaciones que promuevan la defensa de la vida y la dignidad humana.
  3. Actos de amor hacia los más pequeños: Dedica tiempo y cuidado a los niños de tu familia o comunidad, siendo reflejo del amor de Dios por ellos.

Oración para los Santos Inocentes

"Oh Santos Inocentes, que disteis vuestra vida por el Niño Jesús sin saberlo, interceded por nosotros para que siempre defendamos la vida, especialmente la de los más débiles y desamparados. Ayudadnos a ser fieles testigos del amor de Dios en un mundo necesitado de su luz. Amén."


Reflexión final

Los Santos Inocentes son un recordatorio vivo de la necesidad de valorar y proteger la vida de los más pequeños y vulnerables. Su fiesta es una invitación a ser defensores activos de la vida y de la dignidad humana en todos los ámbitos. ¡Que su testimonio inspire nuestro compromiso!

Forma parte de la Octava de Navidad.

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